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martes, 16 de febrero de 2016

Capítulo VI

Anduve varios días feliz, con una sonrisa de oreja a oreja, es que no lo podía creer, la Jose era más rica de lo que me imaginaba, que mina más intrigante, me tenía loca, me encantaba. Solo de acordarme la noche que pasamos me excitaba, quería repetirla una y otra vez.

Ya era viernes, me tocaba trabajar en el bar y quedamos de juntarnos ahí, luego se iría conmigo al departamento. Como siempre llegué un poco antes que Félix, Rocío – la dueña -, y Vicente, así tranquilita podía prepararme un ron cola, tirarme una línea y ponerme a hacer aseo antes de que empezara el ajetreo. Siempre partía por los baños, luego los pisos, las mesas y al final la cocina. La barra estaba a cargo de Vicente así que ahí no me metía. Me dieron las ocho de la noche, había llegado a las cinco pasaditas, ya tenía todo listo cuando llegaron. Detrás comenzaron a aparecer los primeros clientes.

Tipo once de la noche ya estaba corriendo de una mesa ahora, ya tenía la mandíbula dura por la cocaína y ya me empezaba a preocupar, Josefina aún no aparecía y lo único que quería era verla. Mientras trabajaba observaba de reojo la puerta. Cada vez que se asomaba alguien me saltaba el corazón pensando que era ella. Pero nada. Minuto tras minuto y cliente tras cliente, se me comenzaba a hacer eterna la noche.

Hasta que apareció cerca de la media noche. Yo, para ser bien honesta,  estaba un poco enojada. No sé por qué si no éramos nada, pero me cargó que llegara tan tarde. Quería verla, quería besarla, tocarla, que pasaran las horas soñando con tenerla en mi cama, desnuda, con hacerle el amor.

Pero obvio me hice la loca, no le iba a mostrar enojo cuando recién estábamos empezando a salir, la saludé con un abrazo, un beso y una tremenda sonrisa. Ella también a mí, venía con tres amigas, todas guapas. Se llamaban Natalia, Carolina y Daniela. Eran súper simpáticas, bueno, en realidad todas menos una. La Dani, su mejor amiga, que era más rara que pescado con hombros. A ver, días antes la Jose me contó que se moría por conocerme y ahora cuando lo hizo me miró, me saludó y no me habló más. Rarísima la mina.


En todo caso me daba un poco lo mismo, para minas locas me basto y me sobro, además la que me importaba era la Jose, aunque debo reconocer que nunca en mi vida había visto a una mujer tan bonita como Daniela. Tenía facciones casi perfectas, nariz respingada, rostro anguloso, ojos azules y el pelo castaño oscuro, linda como pocas, pesada como ella sola. 


4 comentarios:

  1. Te das cuenta que me he comido 6 capítulos seguidos? XD X3 Gracias por la recomendación shava

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    1. El jueves se viene un nuevo capítulo de larga duración!!!!

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  2. Jajajajajaaaaaaa... No podí... La Jose y ahora mirando a su mejor amiga... eso nunca resulta bien...

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    1. Y la Agus está clara que nada va a resultar bien de esa historia...

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